Al momento de iniciar una dieta es común escuchar acerca del control y la reducción de calorías; sin embargo, antes de modificar la dieta habitual es importante conocer un poco más sobre ellas y sus funciones.

Para comenzar, debes saber que las calorías son unidades de energía que se encuentran en los alimentos, las cuales son aprovechadas por el organismo para realizar diversas funciones.

La cantidad de calorías que una persona necesita por día varían de acuerdo con su edad, estatura, complexión y, en especial, su actividad física, ya que el consumo calórico (gasto energético) se incrementa a la par del esfuerzo realizado.

Las calorías se encuentran principalmente en:

Proteínas: son los nutrientes esenciales del tejido muscular y se encuentran principalmente en la carne, los lácteos y los huevos. Aportan 4 calorías por gramo.

Carbohidratos: realizan el mayor aporte de energía en condiciones normales. Están presentes en las harinas, las pastas, las legumbres, los cereales y las frutas. Aportan 4 calorías por gramo.

Grasas: cuentan con 9 calorías por gramo y se encuentran en aceites, mantequillas, cremas, embutidos, etc.

Si consumes más calorías de las que usas en tus actividades diarias, subirás de peso, por el contrario, si consumes menos de las que requieres, perderás kilos.

Consulta a un especialista para determinar qué dieta es apropiada para ti.

• No dejes de practicar ejercicio de manera rutinaria.
• Toma en cuenta técnicas de cocina saludable que no agreguen tantas calorías a los alimentos como hornear o asar. Estos métodos también resultan deliciosos, además de fáciles y divertidos.
• Incluye fibra en tu alimentación, ya que te ayudará a sentirte satisfecho sin tener que comer de más.
• Mantén una dieta balanceada y variada.

En todos los productos McCain puedes encontrar una tabla nutrimental que te ayudará a conocer cuántas calorías por porción estás consumiendo.