Muchas veces nuestro ritmo de vida no nos permite hacer el número de comidas que recomiendan los nutriólogos para mantener nuestra salud en buen estado; si bien nos va, comemos tres veces durante una jornada (y no necesariamente de forma balanceada), cuando lo ideal es hacerlo en cinco ocasiones. La razón que dan los especialistas es muy simple: una persona que sólo hace una o dos comidas tiene más riesgo de engordar que una persona que hace las cinco.

Cuando el metabolismo trabaja frecuentemente, quema una mayor cantidad de grasa, logrando que los azúcares no se almacenen en nuestro organismo. Por lo tanto, es mejor comer dosis pequeñas de alimento con más frecuencia, de modo que el metabolismo siempre esté en marcha y queme kilocalorías.

Para lograrlo, toma en cuenta estos puntos:

• La comida más importante del día es el desayuno, pues cubre el 25% de los nutrientes que necesitamos por día.
• Un almuerzo bajo en grasas y azúcares forma parte de una dieta balanceada que ayuda a controlar el apetito, nivela el azúcar en la sangre, acelera el metabolismo y aumenta la energía y la productividad.
• La hora de la comida debe incluir proteínas y muchos vegetales como los que McCain Cosecha Selecta te ofrece en sus diversas y prácticas presentaciones. Con ellos, además de colorear tus platillos, le ofrecerás a tu familia el sabor y la calidad que se merece.
• Comer una barrita de granola o unas galletas integrales puede hacer de la merienda una buena opción para amortiguar el hambre, mientras llega la hora de la cena.

Cuidar de nuestra salud y nuestro cuerpo es una tarea sencilla, sólo es cuestión de desarrollar buenos hábitos en nosotros mismos. Consulta a un especialista para que te oriente respecto a tus hábitos alimenticios, tomando en cuenta tus características y estilo de vida. Hoy es un buen día para empezar.